Os Amantes
Quem os vê andar pela
cidade
se todos estão cegos?
Eles se tomam pelas mãos,
algo fala
entre seus dedos, línguas
doces
lambem a úmida palma,
correm pelas falanges,
e no alto está a noite
plena de olhos.
São os amantes, sua ilha
flutua à deriva
rumo às mortes da relva,
rumo aos portos
que se abrem entre lençóis.
Tudo se desordena por seu
intermédio,
tudo encontra seu código
escamoteado;
no entanto eles sequer
cogitam
que enquanto circulam em
sua amarga arena
há uma pausa na construção
do nada,
o tigre é um jardim que
brinca.
Amanhece nos caminhões de
lixo,
começam a sair os cegos,
o ministério abre suas
portas.
Os amantes lassos se olham
e se tocam
por uma vez mais antes de
cheirar o dia.
Já estão vestidos, já se
vão pela rua.
E é só então
quando estão mortos, quando
estão vestidos,
que a cidade os recupera hipócrita
e lhes impõe os deveres
cotidianos.
Los Amantes
¿Quién los ve andar por la
ciudad
si todos están ciegos?
Ellos se toman de la mano: algo
habla
entre sus dedos, lenguas dulces
lamen la húmeda palma, corren
por las falanges,
y arriba está la noche llena de
ojos.
Son los amantes, su isla flota
a la deriva
hacia muertes de césped, hacia
puertos
que se abren entre sábanas.
Todo se desordena a través de
ellos,
todo encuentra su cifra
escamoteada;
pero ellos ni siquiera saben
que mientras ruedan en su
amarga arena
hay una pausa en la obra de la
nada,
el tigre es un jardín que
juega.
Amanece en los carros de
basura,
empiezan a salir los ciegos,
el ministerio abre sus puertas.
Los amantes rendidos se miran y
se tocan
una vez más antes de oler el
día.
Ya están vestidos, ya se van
por la calle.
Y es sólo entonces
cuando están muertos, cuando
están vestidos,
que la ciudad los recupera
hipócrita
y les impone los deberes cotidianos.