Para Além do Amor
Tudo nos ameaça:
O tempo, que em vivos
fragmentos divide
o que fui
do que serei,
como o facão à cobra;
a consciência, a
transparência transpassada,
o olhar cego de olhar-se a
olhar;
as palavras, luvas
cinzentas, poeira mental sobre a erva,
a água, a pele;
nossos nomes, que entre ti
e mim se levantam,
muralhas de vazio que
nenhuma trombeta derruba.
Nem o sonho e sua multidão
de imagens rotas,
nem o delírio e sua espuma
profética,
nem o amor com seus dentes
e unhas nos bastam.
Para além de nós mesmos,
nas fronteiras do ser e do
estar,
uma vida mais vida nos
reclama.
Lá fora a noite respira, se
distende,
plena de grandes folhas
quentes,
de espelhos que combatem:
frutas, garras, olhos,
folhagens,
costas que reluzem,
corpos que abrem caminho
entre outros corpos.
Deita-te aqui à margem de
tanta espuma,
de tanta vida que se ignora
e se entrega:
tu também pertences à
noite.
Estende-te, brancura que
respira,
pulsa, oh estrela
repartida,
copagem,
pão que inclinas a balança
do lado da aurora,
pausa de sangue entre este
tempo e outro sem medida.
Más Allá del Amor
Todo nos amenaza:
el tiempo, que en vivientes fragmentos divide
al que fui
del que seré,
como el machete a la culebra;
la conciencia, la transparencia traspasada,
la mirada ciega de mirarse mirar;
las palabras, guantes grises, polvo mental sobre la yerba,
el agua, la piel;
nuestros nombres, que entre tú y yo se levantan,
murallas de vacío que ninguna trompeta derrumba.
el tiempo, que en vivientes fragmentos divide
al que fui
del que seré,
como el machete a la culebra;
la conciencia, la transparencia traspasada,
la mirada ciega de mirarse mirar;
las palabras, guantes grises, polvo mental sobre la yerba,
el agua, la piel;
nuestros nombres, que entre tú y yo se levantan,
murallas de vacío que ninguna trompeta derrumba.
Ni el
sueño y su pueblo de imágenes rotas,
ni el delirio y su espuma profética,
ni el amor con sus dientes y uñas nos bastan.
Más allá de nosotros,
en las fronteras del ser y el estar,
una vida más vida nos reclama.
Afuera la noche respira, se extiende,
llena de grandes hojas calientes,
de espejos que combaten:
frutos, garras, ojos, follajes,
espaldas que relucen,
cuerpos que se abren paso entre otros cuerpos.
ni el delirio y su espuma profética,
ni el amor con sus dientes y uñas nos bastan.
Más allá de nosotros,
en las fronteras del ser y el estar,
una vida más vida nos reclama.
Afuera la noche respira, se extiende,
llena de grandes hojas calientes,
de espejos que combaten:
frutos, garras, ojos, follajes,
espaldas que relucen,
cuerpos que se abren paso entre otros cuerpos.
Tiéndete aquí a la orilla de tanta
espuma,
de tanta vida que se ignora y se entrega:
tú también perteneces a la noche.
Extiéndete, blancura que respira,
late, oh estrella repartida,
copa,
pan que inclinas la balanza del lado de la aurora,
pausa de sangre entre este tiempo y otro sin medida.
de tanta vida que se ignora y se entrega:
tú también perteneces a la noche.
Extiéndete, blancura que respira,
late, oh estrella repartida,
copa,
pan que inclinas la balanza del lado de la aurora,
pausa de sangre entre este tiempo y otro sin medida.