O bem-aventurado
Aquele homem à sua frente,
simples de coração,
agonizou por anos
correndo a três empregos.
Um dia, simplesmente,
seu simples coração
explodiu em uma esquina
e despertou no céu.
Deus, bonachão e antigo,
deu-lhe as boas-vindas, aplaudindo-o e dizendo:
que contas da vida?
E aquele homem à sua frente,
simples de coração,
ficou boquiaberto
e perguntou: que vida?
El bienaventurado
Aquel hombre de enfrente,
simple de corazón,
agonizó sus años
corriendo a tres empleos.
Un día, simplemente,
su simple corazón
le estalló en una esquina
y despertó en el cielo.
Dios, bonachón y antiguo,
le dio la bienvenida, palmeándole y diciendo:
qué cuenta de la vida?
Y aquel hombre de enfrente,
simple de corazón,
se quedó boquiabierto
y preguntó: qué vida?