De “Vinte poemas de amor e uma canção desesperada"
Poema IV / XXI
É manhã plena de tempestade
no coração do verão.
Viajam as nuvens como lenços brancos de adeus,
O vento os agita com suas mãos viajantes.
Inumerável coração do vento
batendo sobre o nosso silêncio enamorado.
Zumbindo por entre as árvores, orquestral e divino,
como uma língua plena de guerras e de cantos.
Vento que leva em rápido assalto as folhas soltas
e desvia as flechas palpitantes dos pássaros.
Vento que a derruba como onda sem espuma
e substância sem peso, e fogos inclinados.
Sua quantidade de beijos irrompe e submerge
combatida na porta do vento do verão
Poema IV / XXI
Es la mañana llena de tempestad
en el corazón del verano.
Como pañuelos blancos de adiós viajan las nubes,
el viento las sacude con sus viajeras manos.
Innumerable corazón del viento
latiendo sobre nuestro silencio enamorado.
Zumbando entre los árboles, orquestal y divino,
como una lengua llena de guerras y de cantos.
Viento que lleva en rápido robo la hojarasca
y desvía las flechas latientes de los pájaros.
Viento que la derriba en ola sin espuma
y sustancia sin peso, y fuegos inclinados.
Se rompe y se sumerge su volumen de besos
combatido en la puerta del viento del verano.